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El presunto caso de maltrato infantil ocurrido en la Plaza del Carmen la noche del miércoles ha movilizado a diversas autoridades de San Luis Potosí, luego de que se difundiera en redes sociales un video en el que una mujer agrede verbal y físicamente a una bebé en vía pública.
En el video, testigos captaron a una mujer que empujaba a una niña de aproximadamente dos años, vestida solo con una camiseta y un pañal, pese a las bajas temperaturas. Momentos después, la mujer fue grabada gritándole, sacudiéndola y golpeándola en el rostro y el cuerpo, lo que generó indignación ciudadana.
Ante la denuncia pública, el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) informó que, a través de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (PPNNA), se han activado de inmediato los protocolos correspondientes.
La institución confirmó que ha solicitado la colaboración de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, la Guardia Civil Estatal y los sistemas de videovigilancia C4 y C5, para verificar si existe algún reporte relacionado y tratar de identificar a la presunta agresora.
Además, personal de la PPNNA se trasladó a Plaza del Carmen para recabar testimonios de comerciantes y transeúntes que pudieran aportar información útil para dar con el paradero tanto de la menor como de la mujer que aparece en el video.
Por su parte, el DIF Municipal de la capital también se pronunció, condenando enérgicamente este tipo de conductas. Informaron que ya realizan investigaciones para determinar si la familia de la menor radica en San Luis Potosí capital y así brindar atención integral desde el ámbito municipal.
En paralelo, la Fiscalía General del Estado de San Luis Potosí (FGESLP), a través de su Fiscalía Especializada en Atención a la Mujer, la Familia y Delitos Sexuales, confirmó que ya se abrió una carpeta de investigación por estos hechos.
De acuerdo con el boletín emitido por la institución, las primeras indagatorias indican que la menor fue víctima de violencia verbal y física por parte de una mujer que aparentemente estaba a su cargo.
Elementos de la Policía de Investigación (PDI) ya han comenzado a recabar información para identificar a ambas personas involucradas.
Este caso ha generado una amplia respuesta institucional y una fuerte reacción social, subrayando la urgencia de proteger a la infancia de cualquier tipo de violencia.
